“Tus pensamientos darán lugar a una forma de
hablar, tus palabras provocarán una forma de actuar, tus
actos darán como fruto hábitos que finalmente constituirán tu carácter, el cual, será tu destino".
Todos sabemos lo complicado que es añadir un nuevo hábito a nuestra
vida. Nos aferramos a una forma de hacer las cosas, nos sentimos cómodos en
ellas y finalmente nos agarramos a ello con toda nuestra fuerza. Pareja,
trabajo, e incluso formas de pensar que consideramos nuestras, son algunas de
las cosas sobre las que terminamos adjuntando una etiqueta de mi esposo o
esposa, mi trabajo o mi forma de pensar, que luego son difíciles de cambiar.
Pero, todos estamos de acuerdo en que toda semilla da un fruto y que la
tierra que permite que crezca es la mente. Allí lanzamos semillas todos los días
“debo hacer ejercicio” “tengo que hablar de esto con mi pareja” “tengo que
cambiar de trabajo” “me gustaría ganar más dinero”, etc.
Pero, lo más interesante es que cada pensamiento o semilla que
sembramos, por la forma en la que se proyectan sus palabras, ya viene con un
potencial más o menos elevado para poder llegar a ser una realidad.
No nos será difícil encontrar la diferencia entre estos dos aparentemente similares pensamientos “Quiero una casa más grande” “Gracias a
la vida por el hogar donde vivo, abriéndome a ampliar el espacio donde habito”.
Sí, los dos pensamientos piden lo mismo, pero, el segundo agradece y luego se
abre, sin dar por hecho que existe un deseo o una perspectiva, sino que, en él dejamos claro que seguiremos viviendo felices pase lo que pase.
Pero vamos al tema de este artículo que no es otro que el de saber qué
debo hacer para crear el hábito de hacer yoga. Lo primero es ubicar en nuestra
mente la idea que nos va a apoyar hacia dicho hábito. Es decir ¿por qué voy a
hacer yoga? Una vez que encuentres una fuerte razón te será más
fácil seguir los pasos posteriores que son:
- Elegir un lugar tranquilo, limpio, ordenado, en el que tengas una hora de intimidad.
- Tener el antideslizante y las ayudas.
- Conocer la rutina de tonificación y asanas que vamos a seguir.
- Aplicar disciplina para seguir la rutina marcada, perseverancia a pesar de los objetivos y sensaciones que vayamos encontrando y fe en que el fruto ya está dándose en cada sesión.
- Caminar a pesar de los muchos obstáculos que la mente irá poniéndonos, como son la pereza, las dudas, la indisciplina, la falta de fe, entre otras muchas.
En este blog tienes todos los pasos que tienes que dar e incluso las
tablas que puedes hacer, además de muchas otras personas que estarán abiertas a acompañarte en las etapas más complicadas de tu proceso. Me abro a que me hagas llegar tus dudas para poder, desde del medio en el que nos movemos, ayudarte a seguir avanzando.
Ahora sólo tienes que encontrar la razón de tu sendero y comenzar a
caminar.
¡¡¡Comienza a caminar y afronta los obstáculos dando la máxima prioridad
a tu nuevo hábito personal, avanzando con disciplina, perseverancia y mucha
fe!!!