Es difícil encontrar una práctica tan
completa como el yoga. Podemos encontrar prácticas que trabajan la fuerza y la
resistencia, la elasticidad y el equilibrio, pero, los cuatro elementos son
difíciles de fundir en una misma práctica.
El yoga, logra fundirlos en uno, sin
olvidar que su finalidad no es solo la mejora del cuerpo físico, sino, mejorar
el funcionamiento del cuerpo físico, mental, emocional y energético.
No podemos reducir el efecto y los
beneficios del yoga a estos elementos sin más, sino, que la continua,
perseverante y disciplinada práctica nos terminan llevando a estados muy
elevados de presencia, a través de los cuales, podemos optimizar nuestra
energía y estancia en la vida.
Muchas personas buscan trabajar dos de
estos elementos por la creencia de necesitarlos, sin darse cuenta de que el
yoga es una de las vías más eficaces para tocar todos y cada unos de los
palillos que uno necesita para tener un cuerpo en perfectas condiciones para
vivir en armonía y hacer de la vida una dicha.
El estado de dicha es la finalidad
última de este arte milenario. Alcanzar dicho estado supone despertar a una
nueva forma de utilizar el pensamiento, proyectar la palabra y desarrollar
nuestro servicio con la máxima garantía de eficacia, armonía y cariño.
¡Comienza a hacer yoga y mejora tu vida desde ya!