Las lesiones de espalda son muy comunes, debido al
estilo inconsciente y estresante que llevamos.
Yo, como todos, sufro la tensión del sistema en el que
vivo, aunque, tengo un gran aliado que es la práctica de yoga diario.
Hace un mes y medio me produje una distensión muscular
y una torcedura de ligamentos de las vértebras dorsales. La sensación era muy
incómoda, ya que, asumiendo mi propia responsabilidad, tuve que pasar tres días
durmiendo mal. Cada vez que hacía un giro o un gesto un poco más amplio con la
espalda, el dolor se manifestaba. Sin embargo, confíe en mi práctica diaria y
seguí con las sesiones a la espera de que la espalda se sanara.
En las sesiones de yoga deben haber estiramientos
hacia todos los sentidos posibles para, ya sea para curar o para prevenir,
mantener nuestro cuerpo sano, fuete y equilibrado.
Todos mis síntomas o lesiones las he abordado desde la
práctica de yoga y hasta ahora me han funcionado. En general, las sesiones van
enfocadas a estirar, alinear y fortalecer la espalda, evitando el sobreesfuerzo
en las torsiones y las sobrecargas en las posturas de fuerza que habitualmente
introduzco en las sesiones de yoga.
Desde que doy clases en el Ensanche de Vallecas, lo
cual hace más de cuatro años, he visto muchos tipos de lesión en personas que
venían a las clases. He visto recuperaciones rápidas y lentas, y en la mayor
parte de los casos la constancia y actitud han sido muy relevantes.
Podemos decir que los alumnos que han conseguido sanar
sus dolencias han tenido mucha fe, han sido persistentes, disciplinados y han
hecho lo que tenían que hacer sin dudar. La paciencia es un ingrediente
esencial cuando se trata de dolencias graves que requieren superar la fase inicial
que es la más dolorosa e incómoda.
En muchos casos me preguntan cuál es el sentido de
sufrir dolor si podemos reducirlo o evitarlo tomando algún
"medicamento". Yo suelo explicar que el dolor o consecuencia de haber
sido violentos hacia nosotros es una forma de aprender a frenar, a tratarnos
con más cariño, además de que el hígado es un órgano que ya tiene demasiado
trabajo como para sobrecargarle con química venenosa.
Hilando con lo que decía antes, están aquellos que no
han conseguido de forma natural superar sus dolencias. Debo decir que, en
general, las prsonas que no lo consiguen suelen ser temer un enfoque derrotista
de la vida y por ende, falto de fe en lo que se les propone utilizar para
sanar. Personas que dudan muy a menudo y buscan resultados rápidos que sólo la
química engañosamente provoca, ya que los efectos secundarios con al final más
graves que la cura. Personas que buscan la ayuda de "alguien que les ayude
a sanar" eso que ellos no pueden, cediendo el poder en manos de alguien
que parece "saber lo que tiene que hacer por ti".
Así que ya sabes, con un poco de yoga todos los días,
paciencia y mucha fe se pueden conseguir cosas maravillosas.
Vive la experiencia, sé tu mismo la experiencia y
compártela.
Un
abrazo inmenso