lunes, 4 de agosto de 2014

Los cuatro pasos esenciales para hacer bien una posición de yoga o ásana



Todos comenzamos a saber un poco más sobre yoga gracias a los rápidos medios de comunicación que tenemos al alcance. No obstante, en muchas ocasiones, la información nos llega tergiversada y necesitamos que alguien nos ayude a comprender mejor lo que estamos viendo.

El yoga es un arte muy antiguo que se apoya en ocho sencillas ramas; una de ellas son  las posiciones que se practican o ásanas englobadas dentro de lo que llamamos hatha yoga, que son las que vemos proyectadas en fotos, vídeos y otros medios, como libros. 

De todo lo que vemos en los medios, la información de mayor calidad es aquella que viene proyectada desde los profesionales que tienen en cuenta el desconocimiento del que mira, a diferencia de los que lanzan para "todos" con la intención de llamar la atención o vender tus servicios.

Independientemente del estilo de hatha yoga que estés practicando, debes tener en cuenta algunas cosas esenciales a la hora de ejecutar las posiciones de yoga:

  • Saber cuál es la técnica del ásana que vas a hacer.

  • Permanecer y mantener la posición lo más precisa posible, con o sin ayudas. 

  • Proyectar una respiración fluida y constante, el tiempo que puedas, aportando disciplina y constancia, y el esfuerzo necesario sin llegar al dolor o la incomodidad.

  • Observar, dentro y fuera. Abrirse a profundizar en la sensación física, emocional, mental y energética, captando desde el observador, comprendiendo la experiencia como un regalo universal para ir desidentificándonos del "ego" la "mente" y sus caprichos y ceguera. 


De los cuatro pasos el último es el más complicado. No obstante, necesitaremos aportar fe, disciplina y constancia en el proceso, pero sobre todo practicar cada día olvidando las expectativas y haciendo lo que debemos que no es otra cosa que estar ahí, respetando la técnica, permaneciendo con la mayor precisión posible, respirando de una forma fluida y constante y elevando nuestra capacidad de observar más allá de lo que los ojos nos han permitido hasta el momento. Recuerda aquella frase de El Principito "Lo real es invisible a los ojos"


Un abrazo inmenso y como dijo Confucio "los largos caminos se comienzan con un pequeño paso". 

P.D. Ahí os dejo un vídeo que me ha parecido muy interesante a colación de lo que acabo de decir.